Dedicando canciones

En lo que respecta a la música, soy bastante open mind. 

Escucho de todo aunque no todo me guste y hay ocasiones en que encuentro joyas insospechadas entre ritmos que normalmente no oiría.

Si han seguido mi blog ultimamente, verán que una cosa que no tolero es un mal manejo de la combinación "música + sentimientos"... Y por ello para mí dedicar canciones es caro empeño.

...Aunque lamento que, muy posiblemente, nunca componga una (lo intenté de adolescente y me fue fatal: nunca conseguí combinar letra y música)
Hay personas que han marcado artistas en mi vida y por ello todas las canciones que saquen (hayan tenido o no que ver en mi historia) me harán recordarlos.
Mi primer amor, (que también me dedicó la primera canción de mi vida) por ejemplo, suena a Jerry Rivera, siempre Coldplay será "Tú", mi pareja suena a Marilyn Manson (me dijo que de no ser por él yo nunca hubiera escuchado a ese artista a lo que rebatí "Casi seguro que lo habría escuchado, lo que no habría hecho es apreciarlo"), está Arjona y está Pedro Guerra...

Sé que soy incluso un poco exagerada en esto, porque cuando alguien me dedica una canción me pregunto (y a veces pregunto) de forma insaciable si me la dedica porque la música o la letra le hace pensar en mi y si es la letra por qué y qué versos.

Por lo mismo, yo nunca jamás lo hago a la ligera y siempre dedico la letra. Debe ser por lo que escribo, pero las palabras son muy importantes para mí.
Y si algo he aprendido en estos años es con qué cuidado se deben manejar.
Revisando la historia musical común con una persona querida me doy cuenta qué tacaña he sido en ese sentido comparada contra su impresionante Music Box, pero cada canción tiene su razón.
Podría cogerlas de una en una y explicar por qué esa, en ese momento específico. Por qué la letra de esa canción explica el estado de la situación.
Es tan así, que solo recuerdo haber dedicado una sola canción instrumental en toda mi vida, pero con el título ya se decía todo "Actos Inexplicables" de Nacho Vegas (que además iba emparejada con "Como los erizos" otra canción cuya letra explicaba completamente la situación con esa persona específica en su momento), asi que solo la música y el título explicaban mi desolación.
Nunca he dado o recibido una serenata. 
Son de esas cosas en las que es mejor o pensar, porque no van a pasar.

"Niñas mal" - La escena de la Serenata:

Yo ni con todo el licor del mundo sería capaz de hacer eso. Al menos eso creo.

Pero con toda certeza me dirían lo mismo: "A rechinar a su casa!"

Casi todas las personas que han pasado por mi corazón han tenido su canción. A veces felices, las más de las veces tristes, a veces incluso (cuando no había dedicatoria de por medio) canciones que no tenían nada que ver con la persona o la situación, pero fueron el fondo de un momento específico y así quedaron.
En estos días tengo mucha música a mi alrededor.

Salgo bailando de la oficina, me pongo los audífonos y canto todo el día (incluso frente a mis compañeros, cosa que nunca hice y los tiene bastante sorprendidos) y el domingo pasado canté en la ducha para sorpresa de mi papá, que pensaba que solo mis sobrinitos los hacían.

Tengo mi corazón lleno de música ahora.
Y agradezco a quien cada día lo llena más.