Helado y galletas

Ese es el sabor de nuestra navidad
😘

Rodolfo el Reno

Una historia de Bulling y superación 😉
Rodolfo es el nombre de uno de los nueve renos navideños que, según la mitología navideña, tiran el trineo con el cual Papá Noel viaja por el mundo repartiendo los regalos en la noche del 24 de diciembre.
Rodolfo era un reno pequeño al que molestaban los otros renos debido a su nariz roja, que era grande y brillante, pues fue un bombillo que le había puesto un hada cuando era bebé.
Rodolfo era víctima de burlas y discriminación hasta que en una navidad, con una fuerte tormenta el trineo de Papá Noel no podía despegar debido a que no había una buena visibilidad, sin embargo Noeel vio al reno de la nariz roja y decidió pedirrle que fuera su 9 reno ya que con su luz roja, a modo de faro podía guiarlos a todos.
A partir de entonces, Rodolfo trabaja con Santa Claus y cada año le ayuda a repartir los regalos.
Mientras que los ocho renos originales aparecen por primera vez en 1823 en el poema A Visit From St. Nicholas, la historia de Rudolph es añadida a raíz de la publicación de Robert L. May, Christmas story, en 1939

El arte de perder

Un arte

El arte de perder se domina fácilmente;
tantas cosas parecen decididas a extraviarse
que su pérdida no es ningún desastre.

Pierde algo cada día. Acepta la angustia
de las llaves perdidas, de las horas derrochadas en vano.
El arte de perder se domina fácilmente.

Después entrénate en perder más lejos, en perder más rápido:
lugares y nombres, los sitios a los que pensabas viajar.
Ninguna de esas pérdidas ocasionará el desastre.

Perdí el reloj de mi madre. Y mira, se me fue
la última o la penúltima de mis tres casas amadas.
El arte de perder se domina fácilmente.

Perdí dos ciudades, dos hermosas ciudades. Y aun más:
algunos reinos que tenía, dos ríos, un continente.
Los extraño, pero no fue un desastre.

Incluso al perderte (la voz bromista, el gesto
que amo) no habré mentido. Es indudable
que el arte de perder se domina fácilmente,
así parezca (¡escríbelo!) un desastre

Elizabeth Bishop

A mí si me gustó Crepúsculo

Crepúsculo, la saga del amor adolescente entre un vampiro y una humana, fue un éxito de ventas y un desastre de crítica, pero su autora se forró, qué caray.
Portadas de los libros
Tuvo 4 libros y 5 películas.
De los libros salió un fanfiction que terminó convertido en la espantosa "50 sombras de Gray".
Sé que no son libros de gran calidad literaria, puros libros palomiteros y su historia era más predecible que afirmar que el sol sale cada mañana.
Por tanto ya era más que obvio que Bella terminaría con Edward y aunque entiendo las razones de la elección, yo soy 100% Team Jacob.
El mundo no es nada extraordinario y aunque la mayoría de los personajes son floooooojos (empezando por su estúpida protagonista) los vampiros tienen un rasgo que me gustó: los dones particulares que poseen.
Posters de las películas
Digamos que dones obvios como el de Benjamín de controlar los elementos, no son muy impresionantes, pero por ejemplo me gusta el matiz del poder de Alice de ver el futuro (según el cual, el futuro es mutable y cambiante), adoré el sutil poder de Siobhan (también ese nombre tan irlandés) de influir en el curso de los acontecimientos con su deseo, o el de Jasper de influir en el estado de ánimo de otros, el encantador poder de Dydime, de provocar felicidad a su alrededor y especialmente, adoré el de Esme, el increíble poder de amar sin medida. Ya quisiera eso para mi.
Sus poderes no son tan fáciles de explicar, un puro deus-exmachina, no hay una razón lógica por la cual unos vampiros tengan poderes y otros no, ni si se pueden desarrollar en alguien que no los tenga. 
Por otro lado tenemos a los lobos: que no son "hombres lobo" sino humanos metamorfos, que cambian a lobo, pero en los libros explican que en este caso se debe a la herencia y tradiciones quileutes, pero podrían ser jirafas, perros, osos... pero en este caso concreto, son lobos. En el tercer libro dan una detallada explicación sobre el tema.
Una de las cosas curiosas que le ocurren a los lobos es la "imprimación" (que no "impresión" como traducen algunos a lo bestia) en la que un lobo encuentra a quien debe ser su compañera de por vida: una especie de alma gemela. 
Pueden imprimarse de personas incluso ajenas a su manada, y la fuerza de la imprimación es tal que siempre serán correspondidos.
La imprimación puede darse sin importar la edad de los implicados y, especialmente en el lobo metamorfo, será lo que la otra parte requiera según su edad y necesidades: cuidador, protector, hermano, mejor amigo, compañero de juegos, amante.
En el caso de Jacob y Nessie, al ser esta una niña excepcionalmente madura, desde el principio es consiente de sus sentimientos románticos hacia Jacob (algo que una niña humana como Claire -de de solo 2 años y en quien se Imprima Quil Atheara- no verá igual) y en los libros se le describe como "posesiva"; Ella se refiere a él como "Mi Jacob"
En la primera navidad de Renesmee, Jacob le regala una pulsera Quileute, que equivale a un anillo de compromiso para su tribu. Lamento que no se haya dado una descripción de cómo era o cuales de sus componentes o trenzado la hacen asemejarse a este.
Si el objeto de la imprimación muere, el metamorfo imprimado puede enloquecer y lastimar a otros y tratar de matarse, (además que por sus poderes mentales toda la manada sentirá como propio su dolor) de ahí que el respestar la integridad del objeto de imprimación se constituye en una de las leye más importantes de la manada, que en el caso de Jacob y Nessie, termina constituyendo una alianza excepcional entre dos enemigos naturales.
Los humanos en la historia son muy ahí,  bastante obvios y predecibles aunque me encariñé mucho con la alocada y tierna madre de Bella,  Reneè.
Y ya. 
Como saben tengo desactivado el chip de fanatismo,  pero estos libros me gustaron bastante. 
Y no necesito su aprobación 😉 

Poema

Así que a esto huelen las flores muertas
Esas que con el paso del tiempo
han ido perdiendo sus pétalos.
Que caen con el más suave crujido
en el piso de este mausoleo.

SOMETHING GOOD CAN WORK

Amo esta canción, me pone de buen humor, me da ganas de bailar:
"Something Good Can Work" - Two Door Cinema Club

También amo este grupo, "Two Door Cinema Club" porque (especialmente en sus inicios) eran como ese grupo de compañeros de colegio que hacían un grupo y tocaban en las fiestas sus canciones. Son adorables.
(Si algún día los conozco -cosa que dudo y mucho- entraría en modo super fan. Qué terror)
Sus composiciones son muy sencillas (suelen ser cortas) e incluso las que tratan cosas tristes (como "What do you Know") son alegres, no son depresivas ni cortavenas.
Ahí va la letra:
SOMETHING GOOD CAN WORK

ALGUNAS COSAS BUENAS PUEDEN FUNCIONAR
There's a spanner in the works you know,

Hay una llave inglesa en las obras ya sabes,
you gotta step up your game to make to the top.

tienes que intensificar su juego para hacerse de la cima.
So go!

Así que, ¡Vamos!
Gotta little competition now,

Tengo poca competencia ahora,
you're going to find it hard to cope with living on your own now.

Vas a encontrar dificultades para enfrentar la vida por tu cuenta ahora.
Let's make this happen, girl you gonna show the world that something good can work

Vamos a hacer que esto ocurra, chica que te voy a mostrar al mundo que algo bueno puede funcionar
and it can work for you.

y puede trabajar para ti.
And you know that it will.

Y tu sabes que lo hará.
Let's get this started girl,

Vamos que esta chica comenzó,
we're moving up we're moving up

seguimos adelante seguimos subiendo
It's been alot to change but you will always get what you want.

Ha sido mucho cambio pero tu, siempre obtendrás lo que deseas.
Took a little time to make it a little better,

Tomó un poco de tiempo para hacerlo un poco mejor
it's only going out, just one thing and another,

que es sólo salir, sólo una cosa y otra,
you know! You know!

Tu sabes! Tú lo sabes!
PD: creo que ya he mencionado que me encantan los pelirrojos, Yo saldría feliz con Alex Trimble, tiene muchas cosas que me son atractivas.

Sexy o no?


hablaba con un antiguo amigo (con quien hubo un flirt en una época ya pasada) y ¿qué es ser sexy? es una actitud? piezas de ropa? lo que nos vende el mass-media o lo que se siente adentro?

Él no era la mejor persona para preguntarle, ya que además de vestir muy bien, ser listo y divertido y otras buenas prendas, obtuvo un alto ranking en "sexy o no" (lo que antiguamente era algo así como el "mercado de valores" del ligue, ahora obsoleto con Tinder y adopta un man, por ejemplo) entonces era su muy previsible respuesta de "es una combinación de todo".
Es este época de match y vagabundeos es difícil decir qué puede o no ser sexy y está clarísimo que la cosa es más individual, y que a medida que la vida corre, empiezan a atraernos coas que antes eran impensables.
Si empezamos con que "sexy" viene significando que nos atrae para tener sexo, el que diga que ha mantenido el mismo ideal toda su vida miente.
O tiene una mente muy cerrada.
Mi ideal masculino siempre fue Oliver Kahn, y lo único que tiene en común con mi actual pareja (además de dos ojos, dos brazos, dos piernas y cosas así) es que les gusta el mismo equipo de fútbol.
Ahora, me gusta el gato con botas.
Ya ven si mis gustos son bastante flexibles.
Y si además le sumamos que soy un As de Diamantes...
Por ejemplo, una de las personas de las que estuve más enamorada en mi vida, era bajito, barrigón y con una absoluta cara de tonto. Ojo, que de tonto solo tenía la cara, porque era una persona analítica, muy inteligente y talentoso. Es la persona con quien he tenido las conversaciones más elevadas y estar con él era un brutal estímulo para la mente... lo que causaba amplias sensaciones media docena de palmos más abajo de mi cerebro.
Eso me pasa por ser sapiosexual.
Recuerdo que siempre mencioné que los hombres de pelo en pecho no me resultaban atractivos (me da repelús ver fotos de Paul Stanley por citar un ejemplo) pero durante mi formación técnica caí rendida por un compañero al que no hubiera tenido ningún inconveniente en "sacudirle el tapete"
Por hablar de más repelús, también me rayan bastante las expansiones en la orejas y entre más grandes sean peor para su poseedor. Pero como soy una persona de excepciones, hago una con Dane Cross.
Y hablando de modificaciones corporales, todas en general me bajan la líbido. Empezando por los tatuajes. Entre más tengan y/o más grandes sean, peor para el candidato. Digamos que no los discrimino en otras áreas, pero para lo de ser sexy, claramente pierden puntos en picada para mi. Mi actual pareja tiene la piel inmaculada y el Monesvol sabe que lo agradezco.
Estoy perdidamente enamorada por ejemplo, de Mike Patton quien reúne varias características deseables para mi: abrumador talento,  pecho liso y creo que es de los pocos músicos que quedan que no tiene tatuajes. Y le gusta la comida italiana. Un bono extra. 
Una cosa curiosa es que siempre me gustaron (y me gustan) los pelirrojos (y la verdad, las pelirrojas también) pero en la única cita que he tenido con uno, me aburrí bastante y él conmigo. Había más química en un vaso de agua. Hervida.
Hay una serie de indispensables de amigas y conocidas como el brillo de los zapatos, manicura masculina o el tipo y marca del reloj que a mi me importan un átomo de bledo y en cambio entre más frondosa tenga la barba peor para el candidato a menos que sea papá noel (aunque ahora que lo pienso tampoco tendría sexo con el porque ajá) 
Adoro por ejemplo que un hombre se perfume, pero dista de ser un Indispensable 
Finalmente creo que la búsqueda de la "sexicidad"  es un asunto individual que no deberíamos debatir (o peor aún,  consultar) y que debe encaminamos a lo que nos haga feliz como esta graciosa escena de Posdata te amo 

PD: después arreglo el link. Escribir y editar desde el celular es una completa porquería 

El discurso para mi premio Nobel

Mi traje de coronaci... digo, el del Nobel
En el hipotético mundo de los sueños seré una buena escritora... Y entonces las autoridades literarias del mundo se darán cuenta que el papel ya está out y deciden elegir, por primera vez, a un blogger para otorgarle el Premio Nobel de Literatura.
Dejan de lado blogs eróticos de 3 centavos, disquisiciones amargadas, caricaturas y sátiras, críticas al gobierno, feminismo, veganos y tantísimas expresiones escritas que se encuentran en la web, y se decantaron más bien por prosa bien escrita y modestos poemas. O sea, yo (sé que peco de poco modesta, pero se supone que estamos en un mundo imaginario perfecto donde soy una buena escritora, ¿vale?).
A todos los que les dan el nobel de literatura se los dan por una larga trayectoria (poco más de 500 post... desde los muy buenos hasta simples letras de canciones) o por una obra que con su brillo deslumbre el camino de la literatura. Digamos que hay un par ahí. Digamos.
"Por demostrar cómo la escritura trasciende las fronteras, cómo las nuevas tecnologías, antes de alejar, acercan el proceso de escritura hacia los lectores, hemos decidido entregar el premio Nobel de este año a..."
Y entonces salgo con mi vestido rojo y pronuncio mi discurso:
"Estoy loca. 
No soy una persona normal.
Solo eso explica que antes que llorar, o reír, prefiera escribir.
Que sea la escritura la jaula donde encierro mis obsesiones, tristezas o alegrías, mi vida entera.
Que la escritura me haya permitido dar forma y sustancia a los sentimientos, 
a las sensaciones,
a las emociones.
Divago con mis locuras en un mundo de colores innombrables, de sentimientos imposibles, de personajes inasibles, un mundo intangible, y si, de hecho, virtual.
Mis escritos son de una sustancia que cambia según el entorno, lo que rodee mi vida, porque mi entorno soy yo misma: pueden ser puente o pueden ser muralla, interminable tobogán o eterna escalera, soga que me ahogue o me eleve...
La vida siempre es un conjunto de pompas de jabón que flotan en medio del espacio y siento que solo la palabra la puede hacer real y tangible, que le permite tener duración... una ilusión de eternidad.
Hagan de cuenta el premio y una suculenta cantidad de dinero
Y te agradezco a ti, que por cobardía y miedo no quisiste estar a mi lado...
También a ti, que has estado a mi lado, sosteniendo la mano que guía mi pluma...
Porque habeís enriquecido mi escritura,
y con ella,
mi vida.

(Siendo sincera el único premio Nobel al que puedo aspirar es este):

(A ver qué tal estamos de habilidades manuales... Y si hacer la medalla les queda grande, la imprimen y se la pegan a una moneda de chocolate de tamaño similar; Doble premio, ahí)
PD: El paper craft está pensado para ser impreso en hojas tamaño carta. Suerte ahí.

Amor es...

... Que ponga el control del play en vibrador para darte masaje en la espalda...
😊

Recarga de Energía

Hay, supongo yo, dos tipos de personas a nivel de energía. 
Unos son  terribles, son lo que se diría "vampiros de energía"; son esas personas a las que les preguntas "Cómo estás?" y contestan invariablemente "Bien por no preocuparlo" o peor aún, siempre están mal. Siempre se quejan de su trabajo, de su vida, del mundo, de que no tienen dinero, de que, de que, de que....
Y te deprimen y vuelven trizas... 
Y también me pasa a veces cuando tengo que estar con ciertas personas que... no sé cómo decirlo, quizás que me han herido tan profundamente, porque profundamente las amé; Me pasó por ejemplo con la Abeja Reina.
Debo alejarme para no estallar en gritos con todo lo que siento.
Pero afortunadamente, ese no es el tema de este post.
Más bien quiero hablar de esas personas que me recargan las baterías.
* Pequeña aclaración que debería ser innecesaria, pero toca: No significa que mis otros amigos no sean importantes, es solo que este par de personajes tienen ese efecto especifico en mi.
Digamos que en este momento puedo decir que tengo a dos, eso me hace muy afortunada (hay gente que no tiene a nadie...) y aunque no nos vemos con mucha frecuencia, saber que están ahí y puedo correr a verles resulta tranquilizador.
Son muy diferentes entre si, pero los dos (ambos son varones) adorables.
***
Con uno de ellos me veo dos o tres veces al año (cada quien tiene sus ocupaciones y además, vivimos bastante lejos) y básicamente caminamos y comemos. Me lee lo que escribe (y creo que escribe muy bien, por cierto), nos tomamos de la mano y... No sé, no puedo explicarlo, pero estar con él me deja una sonrisa que dura días enteros.
Él es una persona modesta (una vez le dije que era imposible de satisfacer, curiosamente por ser bastante sencillo) no busca aparentar, creerse más. Solo quiere ser. Y es. 
Es muy talentoso (también dibuja y hace animaciones), es atractivo (aunque las fotos no le hacen justicia) y tiene unos ojos bellísimos.
De entre las muchas cosas que me gustan, están sus manos: son grandes, son cálidas, tienen las huellas de su trabajo: de las flores, del lápiz, del mouse...
También  me gusta como viste: descomplicado, sencillo. Amo hundirme en sus chaquetas, que son perfectas para él. Hace mucho que no lo veo con sombrero que también le queda regio.
Es inteligente (pienso que muchísimo, más de lo que él se considera) y creo que tiene una inmensa capacidad de querer, de modo que me siento afortunada por recibir una parte de lo que él tiene para dar.
En un mundo donde todos quieren aparentar más, poseer más, ser más que los demás, apabullar y pasar por encima de otros... él es un oasis de paz y de tranquilidad.
Con él hablamos de películas, de comida, de animaciones, de recetas... Muy raras veces hablamos de mi trabajo, aunque me encanta preguntar por el de él, por ese mundo tan diferente de mi predecible microcosmos de oficina.
Él es el único de todos mis amigos (Literal, el único) con el que nunca he tenido una pelea o una discusión.
Él es una de las pocas personas (sacando por suspuesto a mi familia) a las que no me cuesta recibirles cosas y es quien ha acertado con algunos de los regalos que más me han gustado.
Él es uno de mis amigos más antiguos (llevamos más de 10 años de amistad) y día a día me siento muy afortunada de tenerle en mi vida, así sea solo por facebook.
***
Calabacita, podría decir, es mi amigo más reciente, pues nos conocemos hace solo un par de meses. 
Es, por ejemplo, el único de mis amigos que tiene acceso a mi instagram, (que abrí, la verdad, solo por aprender a usarlo) porque ajá, a nadie le interesan mis fotos de plantas y flores. A él si, porque las plantas se le dan bien y es experto cuidando orquídeas. Es la única persona a quien he regalado plantas de mi pequeño vivero. El vivero es tema para otro post.
Calabacita me prepara café, me regala galletas y me comenta sobre las delicias culinarias que tiene. Trabaja en una tienda naturista que está muy cerca de mi trabajo y aunque podría ir a verle a diario, temo que lo sature y lo fastidie, como me ha pasado con otras personas. Tiene una boca mucho más sucia que yo (créanme, eso es mucho) y un amplio surtido de groserías y maldiciones.
Calabacita es la segunda persona que conozco que legalmente se ha cambiado el nombre y le llamo de esa manera por su nickname de internet.
Es jovencisimo (no tiene aun 22 años) y  diferencia de la gran mayoría de mis amigos cercanos está en lo que podríamos decir, una situación económica acomodada, pero sin embargo no es nada engreído.
Con Calabacita jamás tocamos el tema de mi trabajo (algo que me estresa y preocupa bastante) hablamos más bien de idiomas,  plantas mágicas (fueron las plantas nuestro tema común),  libros,  comestibles y bebestibles 
Esos son mis amigos de energía. 
Me siento afortunada por tenerles en mi vida.
Ahora que lo pienso hay tres o quizás más tipos de personas, pero quería hablar de ellos dos. 

Fan

"FAN" es la contracción del término "fanático" y dícese del que gusta algo con pasión... hasta la exageración y el fastidio de los demás.
Yo he dicho ya en varios post que esa característica de mis genes se cayó quien sabe donde y que la extravié.
Sin embargo, puedo tener una facultad de ponerme friki si lo deseo (me hace recordar un poco a Knives Chau y lo que le pasó con Sex-Bob-Omb) porque cuando me encapricho de un artista me paso de exagerada y si al artista además lo logro conocer en persona, apague y vámonos porque me paso al modo farandulero.
Así pasó por ejemplo con los de Gatoblanco, a los que les ha dado la mano -uno incluso me abrazó- y de los que su líder Cosmo DaKitten sabe perfectamente quien soy y si me viera en la calle me reconocería (cosa que por ejemplo, no pasa con... digamos, mi exnovio -puedo apostar a que no recordaría mi nombre si le pusieran una pistola en la sien- y otros por ahí) o por ejemplo con Carlos Elliot Jr. (del que tengo una foto juntos, colgada a mucha honra en mi habitación) del que me dio hasta para escribir un post.
***
Por lo mismo, soy acérrima defensora de mis amigos. No significa que cuando la embarran no les diga nada -por dios que me esfuerzo en ser justa- pero casi siempre tiendo a tirar de su lado, a excusarlos, a defenderlos. Casi.
Me gusta la música que hacen, me gustan las cosas que escriben. Me gusta lo que dibujan. Me gusta lo que cocinan.
Así no me gusten, me gustan. Recordé un fragmento de un texto:
"Su canto agria la leche, pero no me importa. Me puedo acostumbrar a la leche agria" 
Los Diarios de Adán y Eva - Mark Twain
Salvo que me pidan que sea objetiva (Desi me lo pidió con su último texto) solo mencionaré las cosas positivas.
Hay amigos que son mi adoración.
Mi familia es mi adoración -así a veces tenga ganas de darle un coscorrón a mis niños- 
***
Creo que un buen modo de determinar mi fanatismo por algo tiene que ver en si me gasto o no el dinero en eso.
Por ejemplo me encanta Santiago Cruz, pero mientras no tengo ni un disco de él, tengo 2 de los 3 de Carlos Elliot Jr. 
Compraría encantada la cerveza de mi amigo Vinicius, aunque odie la cerveza.
Tengo una extensa colección de libros originales -no piratas- de Isabel Allende.
Me voy a gastar una cantidad considerable en un bolso hecho a mano por mi amiga Valen.
Pago café caro, solo por departir unas horas con Calabacita (y casi siempre él me encima las galletas).
***
Soy una pésima fan, es más tiendo a odiar a los fans: desde el detestado club de fans de dios hasta los hinchas de fútbol (a los que realmente puedo ser intolerante).
Ya quisiera uno que todos los fan de futbol fueran asi:

Se me arruinó el chip de fanatismo.
Y de veras que lo agradezco.

...

Voy a encontrar la manera de que lo que haces (y especialmente lo que no)  no me afecte, pues el papel misérrimo que me has asignado en tu vida es el que mejor me queda.