Lo malo de la canción de que hablaré a continuación, es que me encanta. Realmente me encanta.
"Amiga Mía" - Los prisioneros
Bueno. Empecemos con la Banda.
Los Prisioneros fue una banda de rock ochentero de cierto éxito, originaria de Chile y uno de los referentes imprescindibles del rock en español, conocidos por sus letras contestarias y rebeldes.
Esta banda editó su disco número 4 "Corazones" el último con la agrupación original y yo diría que el último valioso del grupo.
La canción "Amiga mía" es creación del líder de la banda, Jorge González y está dedicada a quien él discretamente llama "una amiga"
Quién es esa amiga? Nada menos que la esposa de Claudio Narea, Guitarrista del grupo (Claudia Carvajal)... Así que en esta ocasión la separación del grupo no se debió solo a asunto de ego, aunque González es conocido por tener el tipíco ego de todo líder de banda, o sea, creerse el putas.
Esta banda terminó, literalmente, a puñetazos.
La canción merece el apelativo que doy porque... bueno, escribirle una canción (y qué canción...!) a quien es la mujer de tu compañero de banda (y los prisioneros eran amigos desde la época del colegio!) y fuera de eso ponerla en el disco (el que es considerado, por cierto, el mejor álbum del grupo) donde todo el disco y sus letras están inspiradas en esa relación amorosoclandestina... carajo si la nena debía sentirse honrada, pero...
La letra es desesperada, con claras alusiones eróticas, las mismas que Narea descubrió en la correspondencia de Claudia (y en esa época se escribía a mano, eh!) y que destapó el escándalo.
La relación no dio un brinco, porque González tenía problemas de drogas y personalidad que terminaron minando a Claudia que volvió con Narea (Y dicen por ahí que González casi se mata -literalmente, a punta de pastillas- cuando ella terminó la relación) aunque eso tampoco iba a funcionar.
como otros abrazos... otro olor.
No habrá otros latidos,
no habrá otros orgasmos,
no habrá otras promesas,
ni otro calor.
Aprendiendo de nuevo,
despertando en mi cama.
No habrá otra espalda, la almohada sudada.
sea dentro de un taxi, caminado en la calle,
o dejando que queme el sol...
Cómo puedo comer, cómo puedo escribir,
cómo puedo sufrir, escapar o mentir.
si lo único cierto, y lo único claro,
es tu firme salvaje,
y bendito amor.
Al olor de tu sangre,
al sabor de tu cuello,
al dolor de tu llanto,
al color de tu voz.
moriría mañana, moriría en éxtasis,
moriría en el fondo del éxtasis...
Amiga mía
yo sé que nunca vamos a dejar...
que éste amor se nos vaya.
Al oler la mañana, una frase ingeniosa.
los minutos son oro, como arena en la sábana.
y tomar esa taza, y comer en la cama,
un café con helado, remojado en tu espalda.
Yo me pongo contento, ya no nos levantamos,
y te aprieto en mi pecho, con toda mi alma.
moriría mañana, moriría pegado,
completamente drogado...
Amiga mía
yo sé que nunca vamos a dejar...
yo sé que nunca vamos a dejar...
que éste amor se nos vaya.
No te olvides...
lo que digo...
aún cuando escuches, lo peor...
te estaré amando igual!
Amiga mía...
yo sé que nunca vamos a dejar,
que éste amor se nos vaya...
Así termina esta tragicomedia amorosa, que a los demás nos deja esta canción. Esta bellísima canción que cumple lo que decía Wilde "Toda belleza tiene un fondo de tragedia"
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