Hoy (bueno, anoche) tuve un sueño extraño:
Estaba en mi casa y trataba de cerrar la puerta principal (se parecía a la de casa, pero mirando con atención, me di cuenta que no podía ser. Quizás era la de mi casa de infancia).
Pero en cuanto salía de la habitación, al regresar, ésta se abría.
Me pareció extraño y al poco tiempo mi familia (no toda, solo mi padre y mi madrastra), estaba frente a la puerta, a la mesa, charlando (siempre el comedor en mi casa ha quedado frente a la puerta) y yo les mostraba que la puerta, por más que usáramos cerrojo, se abría. Era como si de repente toda la seguridad que la sostenía cerrada se volviera de goma y bastaba un empujón para abrirla.
Siempre, al final, quedaba abierta.
Anoche chatee hasta muy tarde con Ingeniero y hablábamos de ti: de que tienes varias cuentas de FB, que me bloqueaste de TW, que te escribí desde el 15 y es la fecha en que no te has dignado contestar. Que me quiero morir y al mismo tiempo el orgullo no me va a dejar derrumbar.
¿Eres tu esa puerta que quiero cerrar e insiste en quedar abierta? ¿soy yo esa puerta que tu quieres cerrar e insiste en quedar abierta?
"Si pudieras despejar todo ese espacio que ocupas en tu mente por obsesionarte con esta persona [...] tendrías una puerta y ¿sabes qué haría el universo al verla? Colarse. Se colaría y te llenaría del amor que jamás hayas podido conocer."
-Comer, Rezar, Amar-
-de nuevo-
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