Abejita: 🐝
Prometí que no iba a volver a escribirte aquí, pero ya ves.
Anoche soñé contigo.
En ocasiones te echo de menos. Sé que te vas a casar y pensaba que si siguiéramos siendo amigas te acompañaría a medirte vestidos (no creo que hayas hecho tu propio traje aunque una vez acordamos que si me casaba harías el mío... Por algo eres diseñadora), a comprar el traje que tu listo hijo seguro usará y a mirar comida y como será el color de tu fiesta.
También hubiéramos ido a bailar en este tiempo, y hablaríamos horas enteras y sabría tu opinión sobre mi nuevo color de cabello.
También a veces recuerdo lo que sucedió y por qué, aunque no te hubiera sacado de mi vida, ya nada volvería a ser igual, no te contaría mis sentimientos ni mis preocupaciones... Solo sería un bufón más en tu corte, aunque no dejaría de estar contigo, de compartir los momentos de tu vida.
Sé que estás bien y de corazón te deseo una vida feliz, llena de esa miel que solo fabrican las abejas... Aunque yo no haya podido recuperarme de tu aguijón.
PD: Acabo de terminar de leer "Yo después de ti" y a Louisa le encantan sus medias de abeja. Nunca te pude ver con ese traje y me hubiera encantado (como a ti, supongo, mis guantes de garritas). Siempre las abejas me hacen (y me harán) recordarte, pero soy de las que perdona, pero nunca podría olvidar.
Lo siento.
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Abejita
Esta es para hacerte feliz!
A veces la vida es una completa mierda, y yo creo que si encima, oyes música depresiva, no solo será una mierda, sino que se habrá acabado el papel sanitario.
(hay un dicho de mi país: "Cagao' y con el agua lejos").
Así que trato de no escuchar música deprimente.
Y por eso adoro esta canción: en un 97% de la veces me levanta el ánimo:
"Esta es para hacerte feliz" - Jorge González
Y encima, el vocalista es un luchador: se acabó Los Prisioneros, pero se le midió a ser solista y después de un infarto cerebral, sigue tocando, sigue componiendo y ensayando aun cuando el cuerpo lo traicione. Eso siempre da moral, especialmente cuando se tiene miedo.
Serás mi cómplice
(o bueno, de hecho, eres).
Mejor que nadie sé que estás lleno de inconvenientes y lamento no poder dejar de mirar a mi alrededor, a mirar motocicletas, joyas, flores, bombones y salidas a comer...
pero...
En una pausa de caricias el fin de semana, una vez más me preguntabas que por qué te quería y te decía "Me tienes paciencia" a lo que respondiste "¿Sólo eso?" y dije "Bueno... me tienes mucha paciencia".
Y quizás eso resume muchas cosas, paciencia, por ejemplo, que el sábado te hiciera ir a recogerme para "que hagamos algo" y finalmente terminar yéndonos a casa como cualquier otro día, que tratara de forzarte a ver películas cursis (solo he conocido a un hombre que se somete de buen grado a eso, y es Doc), que te haya hecho ir más de 10 veces a ver si llegó el termo que me dijiste que debía comprar y que no te hice caso, y ahora me arrepiento, que te ponga a salir con mi familia, cargar paquetes cuando vamos de compras y que ayudaras a mi papá a subir 5 pisos la condenada y pesada lavadora de mi familia.
Paciencia, porque ahora te gustan los gatos más que a mi....
"Serás mi cómplice" - Complices
Constantemente nos preguntamos el uno al otro porqué nos queremos. Nunca nos cansamos de contestar. Debe ser que a veces, no creemos la suerte que tenemos....
Yo antes de ti
Acabo de terminar un libro, "yo antes de ti" (del que quizás después haré un post, o quizás un 'libro vs película') y es curioso como me ha recordado a "Mar Adentro" y su libro "cartas desde el infierno" (uno de los pocos libros que aprecio en físico).
El tema es parecido, cómo se vive la tetraplegía, en "Mar..." desde quien la sufre y en "Yo..." desde los cuidadores.
En ambas la conclusión es la misma, la muerte ante la imposibilidad de poder ser lo que se desea, la muerte por elección cuando el cuerpo te traiciona.
Ayer un compañero de trabajo me llevó a casa en motocicleta y fue un viaje largo, no por el trayecto en si, sino por mi terror de que algo nos sucediera (maniobrar esa clase de vehículos en esta caótica ciudad es un gran riesgo). Leía hace poco en el diario que una chica quedo en silla de ruedas y en un descuido de sus padres se arrojó a la piscina porque no era esa la vida que quería vivir.
No apoyo el suicidio, pero si la eutanasia, libre y voluntaria, y si un amigo mio decide suicidarse, no me alegraría, pero al fin y al cabo, sería su decisión. Quizás porque no comprendo que un dolor existencial te saque de ti vida, pero el dolor físico me es mas cercano.
Ya he conocido a dos suicidas y lamento que la vida les haya sido tan ingrata como para llegar a ese acto, pero en el caso del libro y a diferencia de Louisa, yo habría estado todo el tiempo y apoyado a Will en su decisión, todo el tiempo.
Se que esta no es exactamente una reseña de libro, pero esta historia me ha dejado una fuerte impresión.
Quizás haga una reseña decente cuando termine "yo después de ti".
El tema es parecido, cómo se vive la tetraplegía, en "Mar..." desde quien la sufre y en "Yo..." desde los cuidadores.
En ambas la conclusión es la misma, la muerte ante la imposibilidad de poder ser lo que se desea, la muerte por elección cuando el cuerpo te traiciona.
Ayer un compañero de trabajo me llevó a casa en motocicleta y fue un viaje largo, no por el trayecto en si, sino por mi terror de que algo nos sucediera (maniobrar esa clase de vehículos en esta caótica ciudad es un gran riesgo). Leía hace poco en el diario que una chica quedo en silla de ruedas y en un descuido de sus padres se arrojó a la piscina porque no era esa la vida que quería vivir.
No apoyo el suicidio, pero si la eutanasia, libre y voluntaria, y si un amigo mio decide suicidarse, no me alegraría, pero al fin y al cabo, sería su decisión. Quizás porque no comprendo que un dolor existencial te saque de ti vida, pero el dolor físico me es mas cercano.
Ya he conocido a dos suicidas y lamento que la vida les haya sido tan ingrata como para llegar a ese acto, pero en el caso del libro y a diferencia de Louisa, yo habría estado todo el tiempo y apoyado a Will en su decisión, todo el tiempo.
Se que esta no es exactamente una reseña de libro, pero esta historia me ha dejado una fuerte impresión.
Quizás haga una reseña decente cuando termine "yo después de ti".
A veces te extraño...
... porque contigo era que hablaba de temas importantes...
y sentía (aun lo siento) que me prestabas atención.
Puede que solo fuera porque no era nuestra la diaria convivencia, y no estabas distraído por el tenis, los video juegos o un libro, pero...
Es tan perturbador que haya querido hablar del sermón de la pastora invitada y me salgan con citas de los simpsons y después, a jugar fifa 2016...
Poema 48
De "El Jardinero" de Rabindranath Tagore:
Líbrame de las cadenas de tu ternura, amor mío. No me ofrezcas más el vino de tus besos.
Este vapor de pesado incienso oprime mi corazón.
Abre las puertas y deja paso a la luz de la mañana.
Estoy perdido en ti, envuelto en los pliegues de tus caricias.
Sálvame de tus sortilegios, devuélveme la virilidad.
Te ofreceré,
entonces, un corazón libre
Y pues, la canción que me hizo pensar en ese poema, después de muchos años (aunque me gusta más una versión modificada - la primera que leí- que hizo mi hermano, cuando era un adolescente, para un amor que ya no importa)
"Un Ratito" - Andrés Cepeda
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