El guardián secreto

Entre los muchos hechizos que tiene el universo de Harry Potter hay uno que es determinante en la historia: el Encantamiento Fidelio.

Este tipo de magia es de alta complejidad y de gran alcance, cuyo propósito es el de ocultar una ubicación específica, por lo que dicho lugar se vuelve invisible, intangible, inubicable e insonoro.

Este tipo de encantamiento toma una pieza específica de información (un secreto) y lo implanta en la mente de alguien que pasa a ser el Guardián Secreto.

Por tanto el secreto queda a salvo a menos que el Guardián se lo revele a otros, ya sea por escrito o de manera verbal. Aquellos a quien se los revela se convierten en Guardianes Secundarios y mientras el Guardián Primario esté vivo, no pueden revelar esta información a nadie más. Para obligar a un Guardián Secreto a confesar deben usarse las maldiciones Imperius o Cruciatus. Desconozco si también podría hacerse con un veritaserum. Es posible que los Elfos, por su magia tan diferente a la de los humanos también sean inmunes. Ignoro si igual sucede con otras especies mágicas como lechuzas o centauros.

Si el Guardián Secreto muere, todas las personas que hayan aprendido el secreto a través de él se convertirán en nuevos guardianes -primarios- del secreto; Si el Guardián Primario ha optado por no revelar el secreto a nadie, el secreto muere con él.

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Es tan difícil guardar secretos.

Yo he optado porque todo lo que me digan lo es, aunque a veces no resisto el contar algunas cosas (Como el Secreto del Arbolito Sexy Español) aunque jamás digo quienes son los protagonistas. 

En última crisis horrible y grave que tuve (en octubre del año pasado) solo le decía a la única persona que trató de ayudarme en esos momentos "te juro que no te puedo contar nada". Gracias a los dioses lo comprendió y solo me dio paseos y comida, no preguntas. Largos años a mi lado le habían acostumbrado a mi hermetismo.

Por eso mucha gente disfruta contándome sus cosas.

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Esto me hizo recordar este diálogo de uno de mis libros favoritos:

Shogun - James Clavell

"La única manera de guardar un secreto es estando a solas y murmurándole a un pozo vacío en pleno mediodía"

Es tan difícil hallar al quién confiarle tu vida...
Es tan difícil hallar un guardián secreto que sepa que así tu vida sea corriente y poco importante, no es una charla de sobremesa con otros.

Una vida que puede no tener nada de especial -en efecto así es la mía- pero sigue siendo solo tuya. Y puedes decidir no compartirla con nadie.

Por eso mi vida en redes sociales está tan low que no tengo ni una sola foto mía en Instagram o Twitter y en Fb solo tengo las ocasionales (4 o 5 al año) fotos de perfil. Muchísimo menos tags de a dónde viajo, dónde como o con quién estoy. 

Y este blog? es la pregunta obvia.

Casi nadie que me conozca en persona (solo son tres mis amigos) sabe que este blog es mío. Y en él hay cosas que puede que no comprendan, pero sé que igual, no preguntarán.

Y gritar un secreto en medio de la multitud aullante que es Internet, es como gritarlo a un pozo vacío. No importa a nadie. He cambiado la dirección de este blog varias veces, haciendo que muchos lectores pierdan mi rastro. Pero eso no es importante. Solo soy una desconocida más.

Esta canción podría explicarlo...

"The lost art of keeping a secret" -  Queens of the stone age

Una vez más, una canción que nunca había oído y que elijo solo por el título y resulta ser increíblemente adecuada:

But we've got something to reveal
No one can know how we feel...
Whatever you do
Don't tell anyone
Whatever you do
Don't tell anyone

Sin embargo, a veces hay que indicarle al Guardián Secreto que lo es...