Para ti vos, personaje de cuentos...

Antes:

Estoy releyendo un mail, muy viejo ya, donde me relatabas una (la peor que te he conocido) de tus decepciones amorosas. Fue tan dura y terrible, que al día de hoy no te he visto recuperarte de ella.

También hay otra página, una sencilla conversación de MSN donde usabas términos para referirte a mi que, para decirlo de una forma poética, me calentaban el corazón. Me resultaban muy halagadores.

Tienes mil proyectos, unos mas importantes que otros, y me has incluido en algunos de ellos.

Yo he soñado contigo (en alguna parte leí que te sueñas solo con las personas que realmente te importan), uno de esos sueños fue un beso apasionado que me dejó con una sonrisa enorme todo el día (no, no me excitó... solo... no sé, me dejó asi) y otro de simples caminatas y charlas.

De hecho, mirando en mis archivos, descubro que he compartido mucho de tu vida. Creo que más que la mayoría. Eso me honra.

Ahora:

No te incluyo en mis proyectos, como no sean un dia de compras, dormir una siesta abrazados o que por fin me enseñes a dominar ese monstruo que se llama flash CS5. Tu vida gira alrededor de intereses que pueden ser los míos, pero solo de manera fugaz. Para hablar con precisión, se convierten en mis intereses solo por compartirlos contigo. Hacer casitas de pesebre tipo Gaudí, por ejemplo. El problema de la floricultura. Música. Animé. Qué carajos pasó con el restaurante de la carne rica que nunca pudimos localizar y cómo nos gustaría volar Andrés Carne de Res. Cosas así.

Y sin embargo te quiero.

He hecho el firme propósito de decírtelo, de decirlo a cada persona de las varias por las que siento eso. Desde mi papá y la media docena de sobrinos que mis hermanos han tenido a bien darme, hasta mi mejor amigo y mi mejor amiga. Y mi pareja.

Y tu, claro.

Hace un par de días teníamos una charla donde te definías como la manzana podrida del cesto, pero no por ello dejabas de ser manzana.Te dije "estás hecho de luz y oscuridad, como todos nosotros".

Lo sé. No es la frase más brillante del universo, ni he descubierto el agua tibia, pero sé que cuando vas "cuesta abajo en tu rodada" pareces ser incapaz de ver cuán valioso eres y te fustigas sin piedad.

Todo este párrafo (aunque no lo creas lo he estado escribiendo mas o menos tres meses, y cada día agrego un poco más) es para repetirte lo mismo que te dije unas líneas arriba:

Te quiero.

Eres mi ángel oscuro. Mi soñador incorregible. Una de las pocas personas que tiene la facultad de sacarme totalmente del mundo en que vivo, y también de regresarme a él de un patadón. Así eres. Así te conocí y te acepto. Y así te quiero