Este post es una loa a las cobijas de mi casa:
(todas menos esa... jijiji)
Si. En mi casa había "una fabrica de bebés". Al menos dos de mis sobrinos fueron concebidos bajo ella y duró hasta que se cayó a pedazos de puro vieja) |
En mi casa, habitualmente, los domingos son para la familia.
Por problemas de horarios y labores, es raro que nos veamos fuera de ese día (y ni hablar de los agarrones familiares que nos han privado de poder tener a los sobrinos quedándose a dormir), de modo que celebraciones, paseos y visitas son para ese día... pero como no son tan frecuentes, la mayoría de las veces, ese día se convierte en sinónimo de estupendo (y completamente antisaludable) desayuno, películas (ahora que ya hay un TV tamaño grandote) y siesta.
En la sala de mi casa hay un par de sofás y un par de sillones grandes y mullidos, donde dormir la siesta se convierte en un imprescindible; algunos domingos, incluso hacemos doble siesta: una después del desayuno (desayunamos por ahí a las 9am) y otra después de almorzar (y almorzamos tipo 2 o 3 pm) y para ello, tenemos las cobijas, porque dormir siesta aguantando frío no tiene gracia.
Cada uno de los vivimos en esta casa tiene su propia cobijita para siestas (rara vez utilizamos una que no sea la propia) y suelen estar en los sofás de la sala, o sobre las camas, ahí al alcance de la mano.
Cuando viene la familia, está la mullida alfombra (y un enorme montón de cojines) y hay muchas cobijas extras en los armarios para que también se arropen.
Mi pap y mi Map tienen la suya y yo la mía, que ocasionalmente comparto con mi pareja (cuando nos amontonamos juntos en uno de los sofás).
Una cosa curiosa es que todas son de cuadritos, ve tu a saber por qué "cuadriculada" razón familiar :P aunque esa tela viene en diseños surtidos.
La más antigua es la de mi Pap y es de color rojo vivo con cuadritos de otros colores; se la regaló mi Map con esa finalidad: que se arropara al ver TV en la sala, porque a mi Pap no le gusta mucho ver TV en la cama.
Poco después, cansado de que yo se la utilizara, mi Pap me dio la mía, de cumpleaños, que es la rojita más oscura, con rayas crema.
Finalmente en una navidad, mi Pap le dio a mi Map la suya, la más oscura, porque ella es muy formal.
Todas son de una tela que se llama "dulceabrigo" que es liviana y delgada pero que calienta muchísimo. O sea, es perfecta para siestas.
Todo en la vida se termina, pero mientras pasa, espero poder seguir disfrutando de las tardes de siesta con mi familia, cada cual con cobija...
Mi pap y mi Map tienen la suya y yo la mía, que ocasionalmente comparto con mi pareja (cuando nos amontonamos juntos en uno de los sofás).
Una cosa curiosa es que todas son de cuadritos, ve tu a saber por qué "cuadriculada" razón familiar :P aunque esa tela viene en diseños surtidos.
La más antigua es la de mi Pap y es de color rojo vivo con cuadritos de otros colores; se la regaló mi Map con esa finalidad: que se arropara al ver TV en la sala, porque a mi Pap no le gusta mucho ver TV en la cama.
Poco después, cansado de que yo se la utilizara, mi Pap me dio la mía, de cumpleaños, que es la rojita más oscura, con rayas crema.
Finalmente en una navidad, mi Pap le dio a mi Map la suya, la más oscura, porque ella es muy formal.
Todas son de una tela que se llama "dulceabrigo" que es liviana y delgada pero que calienta muchísimo. O sea, es perfecta para siestas.
Todo en la vida se termina, pero mientras pasa, espero poder seguir disfrutando de las tardes de siesta con mi familia, cada cual con cobija...
Una tradición de bastante arraigo en muchas familias es la de tomar una siesta los fines de semana. Infortunadamente para mí, esa tradición no ha tenido mucho arraigo: me la paso como lechuza mientras todos duermen en casa.
ResponderEliminarLástima, pero aunque uno no duerma, el arrunchis con los otros también cuenta...
ResponderEliminar