una fiesta

 Confieso que me gustaría, un día, hacer una fiesta así...


Hice muchas llamadas:

—En agosto no pasa nada interesante, así que por las pinturas que Tiantian ha hecho últimamente, por la novela que no puedo concluir, por la amistad, la salud y la felicidad, los invitamos a nuestra fiesta "1+1+1" —repetí en cada llamada.

"1+1+1" quería decir "una persona, una rosa, un poema

Les dije que la rosa la tenían que regalar a la persona más hermosa según cada quien (podía ser del mismo sexo o del sexo opuesto) y el poema lo tenían que ofrecer a la persona más inteligente, según cada quien (podía ser del mismo sexo o del sexo opuesto). Las estadísticas decidirán quién es la persona más bella y quién la más inteligente. Y si están de acuerdo podrán ofrecer su cuerpo a la persona que más desean (puede ser del mismo sexo o del sexo opuesto). 

Cuando terminé de anunciar con toda claridad las reglas de la fiesta, el lugar estalló en chillidos, silbidos, zapateos, ruido de vasos rotos que invadieron el lugar y casi tiran abajo el techo.